Hablar de sexualidad no debería ser tabú: recuperar lo sagrado del cuerpo y el placer
A pesar de vivir en una era hiperconectada, donde casi todo se comparte sin filtros, hablar de sexualidad sigue generando incomodidad. Se disfraza con eufemismos, se evita en familia y se esconde bajo capas de culpa, vergüenza o risa nerviosa. Pero… ¿por qué? ¿Por qué algo tan natural, vital y humano como la energía sexual sigue siendo un tema prohibido? La sexualidad ha sido uno de los espacios más controlados de la historia humana. Religiones, culturas y sistemas sociales han intentado definir qué es “correcto” o “aceptable”, desconectando al ser humano de su propio cuerpo y de su placer. Durante siglos se nos enseñó a reprimir en lugar de sentir , a temer en lugar de explorar , y a callar en lugar de compartir . Cuando no se habla, se distorsiona. Lo que no se comunica se llena de culpa, y así la sexualidad se convirtió en un campo lleno de tabúes, juicios y heridas invisibles. Sin embargo, la sexualidad consciente propone un camino de regreso: reconocer que la energía...